martes, 28 de abril de 2015



Confesiones de un Diario inmoral

Codicio su desnudez...
Siento dilatar sus labios

Ahogados en los míos

Apretados entre mis nocturnas 
Horas de piel mojada.

Ansío humectarme en su espalda
Sin importar el murmurar
De las luciérnagas
Testigas de mis caníbales desvaríos.

Ansío su boca para quedarme

En su imagen cautiva y sin salida

Rompiendo su cremallera al agitar

enardecido de mi deseo bravío


Como degusta mi Thanatos 
Dialogar entre el umbral con tu Inocencia!
Henchiré de sordidez el seno de tu complacencia;
esperando el desvanecer de las luces para arrastrar sin 
Medidas el presagio de que serás mio
Para que dilatadas las pupilas,
En éxtasis, jamás olvide el aroma de tu dermis...
que retorna con demencia embriagada del veneno
en donde se esconde mi pecado.

















Yeimy lizeth Castillo zea 

Universidad del Tolima 

IDEAD- Licenciatura con Enfasis en Lengua Castellana